La crisis global golpea fuerte en el sector inmobiliario local. En promedio, las operaciones mermaron en un 70 por ciento en los últimos meses. A pesar de la poca cantidad de contratos, los precios de ventas y alquileres no han disminuido y la incertidumbre política por el posible adelantamiento de las elecciones paraliza a los inversores.
Opinan los comerciantes del sector y trazan un imprevisible panorama.
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