En el mediodía del lunes se dio una singular situación cuando la policía realizó una persecución y allanamiento en procura de dar con un sospechoso de robo. Fue identificado y perseguido por varias cuadras.
El sujeto en cuestión fue divisado en las inmediaciones de la clínica de la UOM en Mitre y Lamadrid. Personal de Policía Local lo detectó cuando intentaba ingresar en el interior de un vehículo VW Bora. Advirtiendo la presencia de los uniformados el sospechoso comenzó una huida a la carrera, perseguido por los policías.
Fue así que se metió en una finca en calle Obligado, entre Lavalle y León Guruciaga , que pertenecería a su padre y donde ingresó saltando un tapial.
Hasta la puerta los uniformados lo siguieron y pidiendo apoyo se gestionó la orden de allanamiento que fue otorgada rápidamente por la Jueza de Garantías, la Dra. María Eugenia Maiztegui.
Mientras se cerraba la cuestión administrativa se rodeó la manzana con efectivos de la Policía Local, Policía de Seguridad y DDI.
La diligencia se completó sin inconvenientes cuando la puerta fue franqueada y la persona buscada se entregó sin ofrecer resistencia.
Se trata de Carlos Eduardo Álvarez, sobre el que pesaba un pedido de captura por el delito de Robo Calificado desde marzo de 2016, a pedido de la fiscalía 1 de la Dra. Verónica Marcantonio.
Álvarez quedó alojado a buen resguardo a la espera de ser indagado en las próximas horas.
Este sábado, “Poncho” tocará en el Festival Vibra