La policía tuvo más de una decena de intervenciones por infracción a la Ley 23737. En acciones de rutina en prevención del delito de la identificación de personas y el cacheo preventivo se dio el secuestro de estupefacientes.
Las acciones policiales de efectivos de comisaría, Distrital y Policía Local, fueron en todo el ámbito de la jurisdicción. Se dieron a diversas horas, en peatones y motociclistas.
Algunas de estas diligencias terminaron con resistencia a la autoridad por parte de los infractores. Algunos de ellos alegaban a modo de defensa que se trata de un hecho de índole privada que consumieran drogas.
Ese concepto mal aprendido no lo exime a quien llevare consigo sustancias prohibidas que queden aprehendidos a disposición de la fiscalía en turno para que decida sobre su situación.
Además de la primera deducción sobre la cantidad de consumidores, más en profundo habría que analizar las situaciones sociales de cada uno de ellos y su entorno. No es una cuestión que le corresponda a la policía. Y resulta grave que haya que distraer elementos y tiempo en atender estos delitos en la vía pública y las comisarías.
Sin mayores detalles podemos desglosar que la policía intervino en doce situaciones en las cuales en el cache preventivo se secuestraron envoltorios de nylon con picadura de marihuana y colillas semi combustionadas.
Además de una planta de cannabis de regular dimensión.
Esto suma unos 50 grs. en pequeñas fracciones y una docena de aprehendidos.
En algunas de las intervenciones de la policía se constató que las personas estaban en actitud sospechosa.
Funcionario judiciales manifestaron que existe una relación directa entre el consumo de drogas y otros delitos, por lo que la problemática se entiende como de narcocriminalidad, con distintas variantes de ilícitos prevenibles.
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