Personal del CPC en tareas de rutina identificó a un sujeto sospechoso. Se movilizaba e una moto con las cerraduras forzadas. Había sido robada hace unos meses atrás.
La diligencias se concretó en la tarde del jueves.
Un sujeto llegó a la estación de servicio y en el lugar se cruzó con una patrulla del CPC en tareas de rutina.
La actitud evasiva del motociclista no pasó desapercibida para los uniformados.
Cuando se acercaron a identificarlo, notaron que las cerraduras de la moto estaban forzadas.
En el cruce de información vía radial, se pudo constatar que el rodado tenía pedido de secuestro activo por el delito de hurto de febrero de esta año.
El secuestro y su ocupante fueron trasladados a la sede de la comisaría Tercera, donde quedó a disposición de la fiscalía en turno.