El ajuste y la falta de presupuesto a lo más crítico, como lo es la salud, implica poner en riesgo la propia dignidad de la gente.
En ese orden, el llamado de URGENCIA AL 107 debería tener del otro lado una respuesta inmediata. Ante tamaña necesidad, nos proponemos incorporar ambulancias comunes y de alta complejidad, distribuidas estratégicamente por la ciudad y, las siempre postergadas, delegaciones.
La descentralización y modernización del estado municipal, es vital para que cumpla su función primordial: Servir al Vecino. Este servicio debe ser efectivo, que los nicoleños lo noten, lo vivan, lo disfruten y lo perciban con transparencia. El destino de sus contribuciones debe verse volcado en el beneficio de la población en su conjunto.
Vemos tristemente, la desidia sobre población por parte de las autoridades, que se han despreocupado y abandonado los CENTRO DE SALUD EMERGENTES en los distintos BARRIOS.
La falta de respuesta a un valor tan elevado como lo es la salud, debe repararse con la presencia de por lo menos de DOS HOSPITALES PARA ESTA COMUNIDAD, funcionales y BIEN ATENDIDOS.
Ya no estamos en los años 50 y 60, un solo centro de salud como lo es nuestro Hospital Provincial, es negar el crecimiento exponencial de habitantes, poniendo innecesariamente en riego, día a día, un bien tan sagrado como lo es la salud.
El compromiso no debe ser acotado y circunstancial, la salud obliga un plan integral, sistematizado y a largo plazo, sin posibilidad de aceptar en sus respuestas, falencias evitables.
Benjamín Weder presentará exhibición en Cálamo Cultural