El Tribunal Criminal 1 encontró penalmente responsable de la muerte de Priscila Schneider a su tío abuelo, Ramón “Oreja” Almirón, y lo condenó al máximo de pena. En la lectura del fallo se enumeraron las circunstancias y agravantes del hecho ocurrido en 2011, y se le impuso el máximo de pena, prisión pepetua.
El 28 de abril de 2011 personal policial halló el cuerpo de una niña fallecida.
Priscila Ailén Schneider de 12 años de edad había sido vista por última vez con su tío abuelo. Ramón Almirón de 56 años, que estaba prófugo, y fue hallado días después en Luján.
Para el fiscal, Dr. Jorge Leveratto, Almirón mató a la menor en un pacto de sangre, por una relación amorosa enfermiza.
En la lectura del fallo, en el que no estuvo el imputado, quedó acreditado que Ramón Almirón estaba en plena conciencia de la criminalidad de sus actos.
En aproximadamente treinta minutos la secretaría del Tribunal leyó la fundamentación del voto de la Dra. Belén Ocariz, que fue ratificado por sus pares, Laura Fernández y Cristian Ramos.
Concluyó que las pericias científicas fueron excluyentes para demostrar que Almirón ultimó a su sobrina nieta de varias puñaladas, y que había mantenido relaciones sexuales con la misma.
Por ello se lo encontró penalmente responsable del delito de “Homicidio Calificado por Alevosía, y Abuso Sexual con Acceso Carnal”.
El veredicto condenatorio a prisión perpetua quedará firme en los próximos días.
FE DE ERRATAS
Mientras tanto se conocerá en las próximas horas la condena del Tribunal Criminal 1 en el juicio abreviado por la muerte de Débora González, del que Almirón SE NEGÓ A DECLARAR en todas las oportunidades que fue citado
Se trata de un hecho ocurrido en 2007 con amplia resonancia.
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