En San Nicolás, el homenaje a quienes participaron de la Guerra de Las Malvinas hace 31 años atrás, contó con la presencia de funcionarios municipales, autoridades civiles, militares y policiales, con vecinos de la ciudad, alumnos, y miembros del Centro de Veteranos de Guerra y Familiares de Caídos en Malvinas.
El acto principal se realizó en el Monumento Veteranos de Malvinas, luego de recordar a los caídos en combate con ofrendas florales en el Monumento Héroes de la Patria y en la tumba del Veterano de Guerra Víctor Daniel Pallares.
Los actos, organizados por la Municipalidad y el Centro de Veteranos, iniciaron el lunes por la noche con una vigilia en la Costanera y continúo el martes a la mañana.
El encargado de dar inicio a los discursos, fue el presidente del Centro de Veteranos, Sergio Domínguez quien expresó su satisfacción por estar aquí recordando esta fecha “donde las fuerzas argentinas recuperaban las Malvinas”.
Dominguez dijo que después de 31 años, “hemos seguido luchando, bregando para que los veteranos del país puedan ser reconocidos y atendidos. Durante este tiempo hemos sufrido las consecuencias que deja una guerra”.
También se refirió a la ley provincial 14.486, que fue promulgada en 2012, calificándola de discriminatoria ya que “se trata de una norma que supuestamente está reivindicando a los Veteranos, pero que solamente está hecha para quienes fuimos conscriptos y civiles, y no para suboficiales y oficiales”
Por su parte, el Dr. Ismael Passaglia indicó que hoy recordaron a los jóvenes soldados que pelearon en las Malvinas Argentinas, así como también, el valor que tuvieron durante la guerra, el izamiento de nuestra bandera patria de nuevo en las Islas que ratificó nuestra soberanía; el Crucero Manuel Belgrano y a nuestros compatriotas que han caído en combate y que hoy descansan en paz en suelo malvinense.
El intendente agregó: “Estos hombres siguen luchando una guerra con la que deben vivir día a día, un conflicto con el que deben cargar y que es muy difícil entender para nosotros que no hemos estado en esa situación. Son 31 años de lucha y jamás han bajado los brazos. Se mantienen de pie, erguidos y con la frente bien en alto. Por eso es nuestro deber honrarlos. Porque son ejemplos de vida y de ellos tenemos que aprender. (…) Esos miles de hombres y mujeres que estuvieron en la Isla y dejaron sus vidas allí, hoy tienen para siempre, no solo nuestro reconocimiento si no la memoria eterna del pueblo argentino”.