Un lamentable suceso ocurrió en San Nicolás, que involucró a una menor de tres años que habría ingerido una cantidad no precisada de aguarrás, accidentalmente. La escueta crónica da cuenta que en momentos que un numerario policial estaba en el lugar, se presentó una mujer con su hija desvanecida en brazos.
De acuerdo al relato de testigos, poco antes en el lugar se habría producido un delito contra la propiedad. Sujetos ignorados violentaron una puerta y se llevaron de una casa que no tenía habitantes en esos momentos, una pantalla LED, dos cámaras fotográficas y una cantidad no precisada de dinero.
Hasta ese domicilio llegó personal de Policía Científica para cumplimentar los exámenes de rigor.
Cuando estaba en esos menesteres llegó una mujer con su hija en brazos demandando ayuda desesperadamente. Según manifestó la niña de tres años habría consumido accidentalmente aguarrás.
La resina vegetal estaba en un recipiente al alcance de la niña, que lo habría ingerido ignorando sus consecuencias.
Al menos así lo manifestó su madre camino al Hospital, en el móvil de la policía.
En la Guardia de Urgencias fue prontamente socorrida por un cuadro de convulsiones.
Los médicos realizaron las maniobras específicas, y se pudo revertir el cuadro.
Horas después fue dada de alta y seguirá en observación, con demanda de estudios complementarios en consultorio externo, según trascendió de fuentes confiables.
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