Punto final para Paraná Metal

Trascendió en las últimas horas que la autopartista villense Paraná Metal está camino a la quiebra o su venta definitiva. Sectores afectados con la suspensión de las actividades de la planta indicaron que los empresarios quieren liquidar sus deudas en el corto plazo para desembarazarce de las estructuras y maquinarias que contienen.
Recordemos que desde hace un par de años la empresa Paraná Metal cerró sus puertas, y con el personal en la calle comenzó una serie de gestiones en las estuvo involucrado directamente el Gobierno nacional, que sostiene con subsidios a parte del personal suspendido. Mientras tanto se agilizaban trámites para retiros voluntarios y jubilaciones anticipadas.
Hubo movilizaciones, cortes de ruta y gestiones en las más altas esferas provinciales y nacionales para evitar el cierre definitivo.
Hace pocos días los representantes gremiales recibieron una nueva promesa de puesta en marcha de la planta en los próximos meses, y hasta la tanto la continuidad de los subsidios que caducaban por un trimestre más.
Sin embargo otra parte de este iceberg lo componen los acreedores, quienes recibieron de los letrados del grupo empresario que conduce Paraná Metal un ultimátum. En el mismo plantean una oferta para pagar parte de la deuda, cómo último recurso antes de la liquidación de los activos de la empresa por parte de la sindicatura que entiende en la convocatoria de acreedores. La mayoría de los afectados ya habría aceptado una quieta considerable en el monto de la deuda, y estaría a la firma de los convenios respectivos para el cobro de la misma.
Con esto se cerraría uno de los últimos capítulos en esta historia. Quedaría ahora el remate de la planta o la venta y salvataje de lo que queda.

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