Interes General
04/08/2008 - 20:39:16



Cuando es necesaria una tragedia


Han pasado ocho años del accidente de Nicolás Cánepa y no se ha modificado la traza de unos cables de 13.200 kv. que llegan a la subestación de Balcarce y San José. Su padre ha reclamado ante Oceba que ha labrado expediente por la "Reubicación de instalaciones eléctricas". Cuando se estaba finalizando la confección de la nota se informaba extraoficialmente que la empresa decidió dar a lugar al reclamo del usuario.

EL INFORMANTE y el programa televisivo “Sensación Térmica, en su momento durante meses acompañó los testimonios de los vecinos del Barrio Las Flores en el reclamo de mayor protección frente al peligro potencial que es la subestación de Transba S.A (Transporte de Energía Eléctrica de la Provincia de Buenos Aires). En el trabajo de investigación periodística recogimos el testimonio de Eduardo Cánepa que nos relató la tragedia que sufrió su hijo. “Mi hijo Matías Nicolás Cánepa Cihuelo, junto con un amigo protagonizaron un accidente el día 31 de julio de 2000 en el domicilio de este último, en la esquina de San José y Balcarce. Estaban jugando en la pequeña terraza que posee la casa y al intentar bajar un alambre el mismo se acerca a los cables, efectuando un arco voltaico ocasionándole heridas graves a ambos” dice Cánepa. “Mi hijo perdió dos dedos del pie izquierdo, la zona del metatarso con quemaduras graves y perdidas de tendones y ligamentos” se amarga, y continúa, “el amigo, quemaduras en ambas piernas con quebraduras de la derecha al caerse desde esa terraza a la vereda. Salvaron la vida gracias a Dios”, concluye.

Nota completa en "Columnistas"

Volver