Dos sujetos irrumpieron en una chatarrería y a punta de pistola intentaron un atraco. El dueño se resistió y con ayuda de sus colaboradores pudo detener a uno de los maleantes.
En el forcejeo se escapó un tiro.
De acuerdo a las primeras testimoniales en la mañana del jueves se produjo un hecho delictivo que culminó con un arresto civil.
Dos jóvenes ingresaron a un comercio recientemente en actividad dedicado a la chatarrería en barrio San Miguel.
Llegaron en una moto y uno de ellos bajó y decididamente fue contra dos empleados y a punta de pistola les exigió dinero.
El propietario del establecimiento observó la situación a la distancia y advirtió lo que sucedía.
Tomó dos ladrillos y encaró al intruso. Lo golpeó con uno de ellos y comenzó a forcejear ayudado por sus empleados.
En el intento de someterlo se escapó un tiro que no hirió a nadie.
Ante la situación el cómplice emprende la huida en la moto.
Al arribo de la policía se encontró con el ladrón inmovilizado y se secuestró un revolver calibre 22.
Fue derivado a la comisaría Tercera, donde quedó a disposición de la fiscalía 1.
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