Truenos matutinos despertaron a la ciudad nicoleña en este viernes. Es el preámbulo de un fin de semana con tiempo inestable, lluvias y tormentas que perdurarán hasta el domingo.
La temperatura no dará tregua. Ascendió en la jornada del jueves y se seguirá elevando en estos días.
El tiempo aguantó que pasara Noche Buena y Navidad para dar paso al temporal.
El Servicio Meteorológico Nacional anuncia una máxima de 35 grados acompañado de lluvias y tormentas aisladas.
El sábado el pronóstico es el mismo sólo que la temperatura ascenderá algunos grados más y continuará avanzando hasta el lunes próximo.
Las precipitaciones cesarían en la tarde/noche del domingo y en el inicio de semana el sol sería protagonista de la jornada.