En los controles conjuntos realizados por el personal de Tránsito y Policía de Seguridad durante el fin de semana, se labraron un centenar de actas de constatación, que derivaron en el secuestro de 20 autos y 40 motos. Las infracciones más comunes están vinculadas a irregularidades en la documentación del rodado o del conductor. Mermaron considerablemente las alcoholemias punitivas positivas.
El Juzgado de Faltas recibió el cúmulo de infracciones que se labraron en los operativos que se realizaron durante el fin de semana.
Hubo controles nocturnos y diurnos.
Se detectaron falencias en la documentación de vehículos y persona que conducían, lo que motivó de inmediato el secuestro de las unidades.
Los voceros de la Subsecretaría de Ordenamiento Urbano informaron que es significativa la reducción de infractores que conducen luego de haber bebido alcohol.
Los controles realizados durante los operativos, sumaron 3 casos de alcoholemia punitiva positiva.
Consideraron los mismos que la perseverancia en los controles es educativo, y que lentamente se tendría que dar la reducción de otro tipo de faltas, como por ejemplo el circular con el casco puesto, en el caso de los motociclistas.
Durante los controles del fin de semana se infraccionaron vehículos “tuneados”, ya que los polarizados de vidrios, la repotenciación de motores, los escapes libres y la reducción de la alzada de carrocería están penados por la Ley de Tránsito para circular por la vía pública.
Los vehículos de carrera no pueden circular en la calle.
Durante los controles la policía debió intervenir en dos oportunidades, ante conductores irascibles que se resistieron a que se los infraccionaran, y los que intentaron con peligrosa maniobras evitar llegar a los retenes.
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