Esta mañana se inauguró la Oficina de Atención de Denuncias por Violencia de Género, que funcionará en la Comisaría Primera de nuestra ciudad. Esta oficina se suma a otras creadas en la provincia de Buenos Aires, entre ellas las de la ciudad de Ramallo y San Pedro, impulsadas por la Dirección General de Coordinación de Políticas de Género.
Participaron de la celebración el intendente municipal de San Nicolás, Dr. Ismael Passaglia, el Comisario Inspector Darío R. Ibáñez; el Juez Dr. Alberto Moreno; la titular de la Dirección General de Coordinación de Políticas de Género, Ana María Suppa; la directora de Acción Social, Patricia Podestá; el director de Seguridad, Rubén Andino y la referente del Instituto Argentino de Negociación, Conciliación y Arbitraje (IANCA), Maria Helena Ferrari.
El Comisario inspector Darío R. Ibáñez expresó que la nueva oficina será un lugar de puertas abiertas para dar contención a la mujer que sufre de violencia de género, y brindarle la guía necesaria para que sepa cómo debe actuar. Para ello, se creó dentro de la fuerza policial un equipo multidisciplinario que se viene capacitando para estar acorde a las exigencias del caso.
Ibáñez afirmó que “si bien sabemos que esta preparación extralimita nuestra función, todos los integrantes ponemos nuestro corazón para que este tipo de hechos dejen de existir, es algo difícil que nos va a costar, pero sabemos que lo vamos a lograr en toda nuestra departamental”.
Por su parte, el Intendente Dr. Ismael Passaglia se mostró muy conforme con las gestiones realizadas por la Policía para la apertura de esta nueva Oficina, afirmando que se trata de un delito que en los últimos tiempos se ha ido incrementando y es por ello que se crea la “necesidad imperiosa de que en cada comisaría haya un área destinada a la mujer, con personal especializado y capacitado” en atender su situación y ayudarla a perder el miedo.
También, expresó que es la puntada inicial para crear muchos más espacios similares, seguramente en las otras comisarías de la ciudad; y se mostró confiado en poder, controlar este delito para erradicarlo de la sociedad nicoleña, y “en un tiempo no muy lejano terminar la Comisaría de la Mujer”.
Luego, se hizo entrega a la titular de la Dirección General de Coordinación de Políticas de Género, Ana María Suppa de un cuadro que representa la lucha contra la violencia de género, a modo de homenaje por su participación en el acto de inauguración.
Ana M. Suppa agradeció este gesto y expresó que para la Dirección que ella administra ver esta imagen de la apertura de una nueva oficina es muy importante porque es una puerta que se abre para que las mujeres o los niños que han sido abusados y golpeados encuentren un lugar confiable donde poder radicar su denuncia y contar la dura situación que están atravesando.
Asimismo, Suppa afirmó que hay que capacitarse para entender a la mujer, porque muchas veces sólo se acercan a preguntar y quieren información pero no se animan a denunciar. Por ello, expresó que quienes se aboquen a dicha tarea deben tener una mirada integral para saber que si la persona se acercó a la Oficina puede estar teniendo algún problema de violencia de genero que le cuesta contar y ése es el compromiso desde la Dirección, que es el mismo que transmitimos siempre: ayudar a esas mujeres a romper el silencio y acompañarlas en la nueva vida que empieza después de esa denuncia, cuando se sale del círculo de la violencia. Para ello, destacó que es importante un trabajo interdisciplinario entre la intendencia y las distintas instituciones involucradas en el tema junto al aporte de la comunidad.
Por su parte, la referente del Instituto Argentino de Negociación, Conciliación y Arbitraje (IANCA), Maria Helena Ferrari comentó su trabajo en los barrios. Manifestó que su trabajo es fundamental y que se aborda a la violencia de género como una problemática social, es decir, como resultado de una modalidad de vida social que “hay que tener muy presente y tenemos que modificar”. Señaló que no sería posible una solución total de este flagelo “si no se trabaja en red con los servicios asistenciales y si no se empiezan a pensar proyectos realmente comunitarios para poder trabajar con la persona en el lugar donde vive”.