Este sábado, personal de la Agencia de Control Policial realizó diversos allanamientos por orden del Dr. José Luis Caterina, de la Agencia Contra la Criminalidad Organizada, por una causa que investiga el homicidio de Nelson Saravia (alias chivo) por el que fue detenido en su momento Guillermo “Chupa” Sosa.
Como resultado detuvieron a los empleados policiales subinspector Daniel Luciano Arellano, con prestación de servicio en el Puesto Verificador y el suboficial Mauro Barúa, que revistaba en la Comisaría 9ª de Rosario.
Los investigadores de la Agencia de Control Policial Delegación Zona Sur, cumplimentaron la medida judicial en principio en un galpón situado en Guatemala 2200 de Rosario, lugar donde se encontraban varias personas entre ellos empleados policiales y civiles.
Allí incautaron más de una decena de teléfonos celulares; más de un millón y medio de pesos en efectivo, un revólver calibre 38; una pistola calibre 9mm, documentación de interés a la causa y un motorhome, que sería propiedad del director de Policía Marcelo Mendoza, jefe de la Unidad Regional VI con asiento en Villa Constitución.
En función a las medidas practicadas, el fiscal dispuso el traslado de todos los involucrados hacia la sede de la Agencia de Control.
Más allanamientos
Luego, se llevó a cabo otro allanamiento en Catriel 600 de Granadero Baigorria (propiedad del comisario general (R) Alejandro Fraganillo, ex jefe de Drogas Peligrosas de la Provincia), secuestrando una escopeta calibre 12/70, una pistola calibre 11.25, marca FM, una pistola en desuso, marca Steyr 1916, gran cantidad de municiones y cartuchos, dinero en efectivo, dólares y teléfonos celulares.
Otra comitiva de efectivos de la agencia de control policial procedió a la requisa de la finca sita en Junín 700 de Rosario, residencia del director de Policía Marcelo Mendoza, donde secuestraron un revólver documentación de interés para la investigación, computadoras, pendrive y equipos de telefonía celular.
En la finca de Constitución 4000 de Rosario se efectuó la detención e incomunicación del suboficial de Policía Mauro Baruúa por el delito de “asociación ilícita”, el secuestro del arma reglamentaria, dos teléfonos celulares, el arma y documentación varia.
Un allanamiento similar se llevó a cabo en la casa de calle Salta al 300 de Villa Gobernador Gálvez donde se formalizó la detención e incomunicación del subinspector Daniel Luciano Arellano, a quien se le atribuye responsabilidad penal en orden al delito de “asociación ilícita, encubrimiento agravado y violación de secreto”. Aquí también se realizó el secuestro de cinco teléfonos celulares y documentación de interés.
Asimismo, Dr. Caterina dispuso formar causa penal por “tenencia indebida de arma de fuego”, al director de Policía Marcelo Mendoza y a C.R.D., propietario de la finca sita en Guatemala 2200 de Rosario, en estado de libertad.
Como así al Crío. Gral. (R) Alejandro Franganillo por el delito de “tenencia indebida arma de guerra”, con identificación dactilar, en estado de libertad. Quienes se encontraban en la finca requisada compartiendo una comida.
La investigación
Según la información dada a conocer por el periodista de La Capital, Hernán Lascano, la causa que originó estos allanamientos está relacionada a la investigación por el asesinato de 2021 de un barrabrava de Newell’s que sacó a la luz “una trama de presunta corrupción policial” en la que uno de los principales involucrados es el oficial exonerado Juan José Raffo, sentenciado en el juicio que terminó en 2018 contra la banda de Los Monos.
“Por esta misma madeja que pone la lupa sobre intercambios entre delincuentes implicados en delitos de sangre y personal de fuerzas de seguridad fueron detenidos dos policías que cumplían servicios en la Unidad Fiscal de Homicidios en Rosario. Fueron identificados como David Luciano Arellano y Mauro Barúa. Trabajaban en el Centro de Justicia Penal en pesquisas de fiscales que investigan homicidios. El martes irán a audiencia imputativa por asociación ilícita, encubrimiento e incumplimiento de deberes de funcionario público, ante los fiscales de la Agencia de Criminalidad Organizada, Luis Schiappa Pietra y Matías Edery. Los acusarán de facilitar información a un grupo que cometió un homicidio de ribetes temerarios”, detalló Lascano.
El galpón
“Esta causa -cuenta Lascano- se cruzó con otra iniciada en un juzgado federal de Campana a partir de una denuncia anónima en ese tribunal por presuntos delitos. También interviene la Procuración de Narcotráfico (Procunar). El magistrado de Campana abrió un expediente a raíz de una referencia concreta que señalaba que un grupo importante y conocido de policías, algunos que llegaron a posiciones de relevancia, se reunían todos los viernes en un galpón de Guatemala entre La Paz y Riobamba”.
Este galpón fue allanado el viernes por la noche y allí estaban comiendo un asado, entre otros Franganillo, Mendoza, los subdirectores de Policías, ambos retirados, Marcelo Bazán y Eduardo Zapata, junto a algunos civiles.
“Este galpón fue durante décadas lugar de encuentro de distintos policías del área de Drogas Peligrosas y también de civiles ligados”, puntualizó Lascano.
No pesa orden de detención sobre Franganillo y Mendoza, quienes tienen una relación personal de larga data, “pero las viviendas de ambos fueron allanadas. Los fiscales actuantes sí solicitaron que se les extrajeran sus teléfonos y sus armas reglamentarias. Según fuentes del trámite eso se concretó, pero ninguno de los oficiales accedió a entregar las claves de desbloqueo de sus celulares”, indicó el periodista de La Capital.
En las primeras horas de la tarde de este sábado se informó que quedó al frente de la Unidad Regional VI el subjefe, subdirector de Policía Gustavo Orellano (fuente: elsurdiario.com.ar).
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